jueves, 29 de marzo de 2012

Paloma y Cris nos visitan


Cinco días en Estambul.

Día 1, viernes. 

Las chicas llegaron sobre las 18h a Taksim, desde donde fuimos caminando a casa poco más de un kilómetro, eso sí, cuesta abajo. 
Dejamos las cosas y salimos a cenar con Deniz, una compañera de clase de turco. El lugar elegido: el local en el que sirven los mejores adana durum de todo Turquía, en Abdullah Sk. 

Paloma y Cris van a cenar

Con Piero y Deniz, mis compis de turco.

Después fuimos a Bohem, un bar de rock donde la música está a un volumen que permite la conversación, y nos reunimos con nuestro compañero de piso, el doble de Álvaro (que vino desde Ankara a pasar el fin de semana), e Ismail. Al rato apareció Piero, otro compañero de Dilmer, con unxs amigxs. De pronto nos juntamos un buen grupo, pero es que así son las cosas en Estambul: es una ciudad con más de trece millones de habitantes pero lxs expatriadxs acabamos siempre en los mismos sitios. 



A medianoche nos entraron ganas de bailar, así que partimos rumbo a Eski Beyrut, donde la música es siempre divertida y muy bailable. 


Día 2, sábado.

Nos levantamos tarde y con dolor de cabeza. Fuimos a comer a Kahvedan, en Cihangir, nuestro barrio, para después empezar con la ruta turística.

Ummm

Cris y Paloma en la Mezquita Azul

Tranvía Tophane-Beyazit y paseo por el Gran Bazar. Bajamos Divan Yolu Cd y nos damos casi de morros con la mezquita de Sultanahmet (la Mezquita Azul). Tomamos un sahlep, bebida otomana elaborada a partir de la harina aromática procedente de una orquídea silvestre, vainilla, canela, y algún ingrediente más. 

Paseamos hasta Eminönü, comprando baklava de camino, y llegamos frente a la Mezquita Nueva y al Bazar de las especias. Cristina compró curry para su hermana (información imprescindible). 

Regresamos a casa a protegernos del frío y descansar, pues el domingo teníamos un apretado programa.

Sahlep con la Mezquita Azul de fondo.


Día 3, domingo.

Visitamos Santa Sofía, fea por fuera, impresionante por dentro. Simplemente tenéis que verla. Álvaro consigue la tan deseada "tarjeta de los museos", con la que por 10TL puedes visitarlo todo gratis. Andrea se muere de envidia, parece ser que el estudiar en Dilmer no es suficiente, así que Andrea, con su excelente turko, le explica al tipo de la taquilla que Álvaro tiene todos los papeles. Verde de envidia. 


Tuvimos nuestros conflictos...

Comemos algo en Sultanahmet y nos vamos a ver el Topkapi Saray (no se escribe así pero blogspot no opina lo mismo). Estaba hasta la bandera. Eso sí, pudimos ver el bastón de Moisés, la llave de la Kaaba, el cerrojo, el canalón... en fin, media Meca frente a nosotrxs. Además, las vistas son espectaculares. 

En Topkapi,Andrea y Paloma, dos cabezas, un solo cuerpo. Pasen y vean.
Harem que las chicas no pudieron ver.

Caminamos de nuevo hasta Eminönü y cogemos el ferry, queremos ver el atardecer desde Asia. Las fotos hablan por sí solas. 


Kiz Kulesi
Europa de lejos.

Europa desde Asia.

Tenéis que venir.


Ya en Üsküdar nos comemos el típico bocadillo de pescado por 5TL. 

Volvimos maravilladxs.


Día 4, lunes.

Nos levantamos prontito y nos vamos de excursión a las islas Príncipe, a una hora en barco de Kabatas. Álvaro se quedó en casa estudiando porque es un joven responsable. Estaba verde de envidia. 




Por 5TL llegamos a büyükada, literalmente "la isla grande", y alquilamos unas bicicletas. En la isla no hay absolutamente nada que ver, pero hacía un día precioso y reinaba una tranquilidad que no se puede encontrar en Estambul.

Regresamos unas horas después y Andrea se fue a clase de turco mientras Álvaro, muy diligente, seguía estudiando, y Cristina y Paloma paseaban por el Istiklal camino de la torre Gálata.

Después de la clase de turco salimos a tomar algo y a bailar con lxs compañerxs de clase.


Día 5, martes.

Andrea durmió mientras Álvaro se fue a clase y las visitantes marcharon al Museo Arqueológico. Después comimos en casa una pizza turca, con champiñones, pastirma, sucuk, pimiento verde y especias. Çok güzel!

Dimos un paseo por el barrio y nos fuimos a una de las mejores experiencias que se pueden tener en Turquía: ir al baño turco o hammam. 
Nosotras escogimos el de Çemberlitas, porque a pesar de ser uno de los más turísticos y caros, el edificio es precioso y tiene muy buena fama. Por unos 40€ nos dimos un masaje de aceite en todo el cuerpo, de media hora de duración, y pasamos casi tres horas en las instalaciones, que cuentan con jacuzzi, piscina de agua caliente, y numerosas fuentes con temperatura regulable. Además, te dan jabones y puedes lavarte tranquilamente, o bien tumbarte sobre la gran piedra caliente que ocupa el espacio central del baño.
Es fantástico.

Çemberlitas hamami

Desde la torre Gálata



Salimos corriendo para ver el atardecer desde la torre Gálata, pero llegamos diez minutos tarde :( 

Volvimos a casa, donde habíamos quedado con algunxs compañerxs de clase para ir a fumar un nargile, una pipa de agua con tabaco de sabores. 


Día 6, miércoles.

Apenas tuvimos tiempo de despertarnos, que Paloma y Cristina recogieran sus cosas, y de ir a comer al Van Kahvalti Evi, un local muy popular en Cihangir. 

La última comida :(

Y las chicas, como vinieron, se marcharon. Nosotrxs lo hemos pasado de lujo, esperamos que vosotras también. ¡Se os echa en falta chicas!

3 comentarios:

  1. Pedazo de viaje joder!! Si es que ha sido la leche!!! Çok güsel! =P
    yo os echo muchísimo de menos!!!!! un besazo guap@s!!!

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  2. Los dulces que me trajo Cris estaban buenisimos. ya los transformé en caca.

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