miércoles, 20 de junio de 2012

Kandy Kandy


Nuestra segunda parada en Sri Lanka ha sido en Kandy. Esta ciudad está a poco más de 100km de la capital. Sin embargo, es imposible recorrer esta distancia en menos de tres horas, ya sea en autobús o en el tren express. Nosotrxs escogimos el tren, 2€ en primera clase, todo un derroche.

Vistas desde el tren.

El alojamiento seguía siendo sorprendentemente barato a pesar de que Kandy es uno de los lugares más concurridos de la isla por tener el Templo de la Reliquia del Diente Sagrado. El diente, que no puede verse, perteneció supuestamente a Buda. 

El diente de Buda vivió numerosas aventuras antes de instalarse en Kandy. Traído por los cingaleses del norte de la India, el diente estuvo primero en las antiguas ciudades de Anuradhapura y Polonnaruwa. Pero debido a las numerosas invasiones de los indios del sur a la isla, fue trasladado finalmente a Kandy, no sin antes haber sido robado por los portugueses (que resulta que no se llevaron el original). 

En Sri Lanka esta reliquia es muy importante por proporcionar soberanía al poseedor de la misma. Es además un símbolo del poder dentro del país. 

El templo. Si os fijáis se ven los monos.

El templo es un timo, sólo merecen la pena los monos que se pasean por ahí. La entrada es exagerada, especialmente comparada con el nivel de vida. Pero aquí hay un precio de las entradas para nacionales, y otro para lxs extranjerxs. 

Una vez entras el templo no vale nada, y encima te quedas sin ver el diente. Aunque con la entrada te regalan un CD muy mono.

No obstante, la ciudad es muy agradable, y el conjunto de templos alrededor del gran timo del diente, y un par de monasterios de monjes budistas merecen la pena.

El lago.


Pero sobre todo Kandy es famosa por el lago artificial construido por orden de un antiguo monarca. Además, es posible ver muchos y muy variados animales en la ciudad: monos, lagartos, pájaros y muchos, muchos mosquitos.

Parecen muy buenos, pero si te descuidas te roban todo.


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